jueves, 17 de noviembre de 2011


Y me di cuenta cuando empecé a coger el autobús de antes, solo para estar 10 minutos más contigo. Me di cuenta, cuando no dejaba de mirar hacia atrás, por si por una de esas casualidades de la vida, aparecías. Me di cuenta, cuando las horas, el sueño y las obligaciones, me dejaron de importar, solo por hablar contigo. Me di cuenta, cuando me hablabas, y no quería que los minutos pasarán, solo quería escucharte y que me contarás todo de ti, y mientras voy descubriéndote poco a poco, pensar que de que jodido cuento te habrán sacado, por qué tú no puedes ser real. Me di cuenta cuando estaba viendo la mejor película del mundo, y prefería mirarte. Me di cuenta cuando sentí miedo, miedo de perderte, miedo que desapareció en el segundo en que tus labios se encontraron con los míos y el tiempo se paro para dar paso a un sueño, un sueño que acaba de empezar, y que no quiero que acabe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario